El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró esta mañana que la refinería de Cadereyta en Nuevo León no contamina y recurrió a la descalificación de siempre cuando no presenta las pruebas de una denuncia, “es politiquería” y de uso electorero. Agregó que esa refinería no es la responsable de la contaminación en la zona metropolitana de Monterrey, pero se hace fácil culpar a la planta propiedad de Petróleos Mexicanos. Aseguró que la contaminación en esa zona tiene que ver con muchas empresas. En su mañanera de este jueves, el presidente defendió nuevamente al gobernador de Veracruaz, Cuitláhuac García de quien dijo podrán decir lo que quieran pero no es rata. También le da su manita al gobernador de Sonora Alfonso Durazo de quien dice que sus viajes al extranjero son para promocionar el Plan Sonora. Insiste en que la gente está muy contenta en todos lados. Me dejo de llamar Andrés si no es así. Y asegura que no tienen nada que ver con el problema de la revista Forbes, “nosotros no perseguimos a periodistas”.