Lily Salinas, Matías Romero, Oaxaca

Gilberto Celis

Por Gilberto Celis

A lo visto en el tiempo, el empoderamiento de la mujer a través de la equidad de género tiene sus asegunes para darse; como supone ha de entenderse la instauración democrática para que las ciudadanas se hagan cargo de sí mismas y decidan su destino. Y que tiene su origen cuando se concede el derecho de voto a las mujeres; pero en un Patrón Medida Hombre obsequiando el beneficio de la duda de si están preparadas para una encomienda que corresponde a los hombres.

— Más bien el hombre y fauna misógina no están preparados para aceptar no la asunción sino, literalmente, el empoderamiento femenino.
— O diga por qué el obsequio machista de la oportunidad de estar en la política pero para adornarla y distinguirla con la paciencia y abnegación de su formación doméstica, y no el empoderamiento para ejercerla.
— Así, el fruto prohibido del poder, apropiado por los varones, se presenta corrupto, enviciado; con pillaje, complicidades, delincuencia, inmoralidad, negligencia.

NATY DÍAZ CONTRAVIENE IEEPCO

Ahí tiene a la militancia activa panista acusando a Natividad Díaz Jiménez, Presidenta del CDE PAN Oaxaca, de postular candidatos que no garantizan el triunfo sino la derrota electoral; a fin de asegurar su triunfo como candidata plurinominal a diputada federal por la tercera circunscripción, hacer legislador al papá Don Leo y al hermano Leonito.

— ¿Y aquel edil que falsificó su acta de defunción y dicen escondió Don Leo?
— ¿Y entregar la candidatura del PAN a la presidencia municipal de la capital oaxaqueña, al corrupto priista Samuel Gurrión?
— Grave, contraviniendo las notificaciones del IEEPCO, no cumple con la paridad de género y si quita a mujeres con perfil garantizado de triunfo como Lily Salinas en Matías Romero, postulando a varones de otros municipios.

Esa cloaca de Naty Díaz, Presidenta del CDE PAN Oaxaca, enfrenta Lily Salinas la afirmación de su aspiración política de, a 111 años de la fundación del Pueblo de Matías Romero, representar la necesidad de las mujeres como la primera presidenta municipal.

—— Le digo, en Natividad Díaz es evidente que la miseria simbólica es la más terrible de las miserias; tal apuntara Alessandra Bocchetti.

— Por eso le digo.

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