Rebela el obispo de Chilapa, Guerrero, Salvador Rangel Mendoza que se ha reunido cuando menos con 5 o 6 grupos criminales de la entidad, pero advierte que no va a pactar con ellos ni busca ningún beneficio político.

El prelado señala que hay que dialogar con los provocadores de la violencia, porque como el lobo que mataba a las ovejas, ellos tienen sus razones.